Javier Gutiérrez Jaramillo nació en Manzanares hace 71 años desde muy joven trabajó labores del campo, vendía huevos, leche, luego vendió revuelto en la plaza de Bolívar, después estuvo en el gremio de los conductores durante 25 años manejando carro de servicio público y particular, dice que se metió al gremio de ganaderos pero se quebró y ahí comenzó el oficio que tiene actualmente como expendedor de carne y completó 41 años en el mismo, primero en la plaza de Bolívar en los toldos, luego pasó a las galerías segunda planta, actualmente en el primer piso hoy denominado Centro cultural y de la juventud. En los dos gremios se desempeñaba y un amigo comerciante que en paz descanse Emiliano Parra le dijo hace muchos años que el se metió a los dos gremios mas malos que existían en el país. Su expendio o fama llama La Confianza a ver si la gente le lleva platica a guardar dice entre risas, pero que la gente no le lleva nada. Cuenta que el kilo lo vendía a doce pesos hoy cuesta nueve o diez mil pesos. Dice que la vida es muy linda y la mayor clientela que tiene son los campesinos. Casado dos veces y ha enviudado las dos, con la primera señora tuvo cinco hijos, tres hijos hombres en la misma profesión del papá y dos hijas. Le gusta la música antigua y en los ratos libres ve noticias por televisión y sale a caminar.
7 mar 2012
Javier Gutierrez un Comerciante toda la vida
Javier Gutiérrez Jaramillo nació en Manzanares hace 71 años desde muy joven trabajó labores del campo, vendía huevos, leche, luego vendió revuelto en la plaza de Bolívar, después estuvo en el gremio de los conductores durante 25 años manejando carro de servicio público y particular, dice que se metió al gremio de ganaderos pero se quebró y ahí comenzó el oficio que tiene actualmente como expendedor de carne y completó 41 años en el mismo, primero en la plaza de Bolívar en los toldos, luego pasó a las galerías segunda planta, actualmente en el primer piso hoy denominado Centro cultural y de la juventud. En los dos gremios se desempeñaba y un amigo comerciante que en paz descanse Emiliano Parra le dijo hace muchos años que el se metió a los dos gremios mas malos que existían en el país. Su expendio o fama llama La Confianza a ver si la gente le lleva platica a guardar dice entre risas, pero que la gente no le lleva nada. Cuenta que el kilo lo vendía a doce pesos hoy cuesta nueve o diez mil pesos. Dice que la vida es muy linda y la mayor clientela que tiene son los campesinos. Casado dos veces y ha enviudado las dos, con la primera señora tuvo cinco hijos, tres hijos hombres en la misma profesión del papá y dos hijas. Le gusta la música antigua y en los ratos libres ve noticias por televisión y sale a caminar.
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