El gremio cafetero tiene que liderar un plan de cambio o de renovación de los cafetales actuales en el oriente de Caldas.
La contrastante situación que vive el país cafetero por efecto de un precio que cada vez es más atractivo, mientras la existencia del producto sigue a la baja y muchos caficultores, como los del oriente de Caldas, se enfrentan a la ruina porque extensos cultivos están literalmente acabados por la roya y el invierno, debe llevar a las autoridades y al gremio a tenderles la mano para superar semejante tragedia.
Eso fue lo que motivó el viernes pasado en Manzanares (Caldas) la realización de un foro cafetero al que asistieron las principales autoridades del sector, el Ministro de Agricultura, Andrés Fernández Acosta, y el Gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros, Gabriel Silva Luján, quienes atendieron la invitación que les formularon los productores para buscar alternativas de solución al problema que según primeros estimativos podría reducir entre un 14% y un 20% la cosecha en esta zona, que está a las puertas de entrar en la principal cosecha del año.
La dramática situación que enfrentan centenares de familias de esta población y de municipios cafeteros aledaños hizo acudir a sus representantes ese día, en gran número, al Centro Cultural y de la Juventud no sólo para exponer su situación y reclamar apoyo estatal, sino para escuchar las exposiciones de las autoridades, principalmente las del titular de la cartera de asuntos agropecuarios que fue quien concentró la atención por sus respuestas y planteamientos frente al problema.
Hay que celebrar la disposición de los asistentes de la Federacafé y del Gobierno Nacional para atender el llamado comunitario frente a un tema tan difícil. En ese sentido el ministro Fernández Acosta, quien tomó la vocería general, reconoció la existencia del problema y aunque no dio soluciones precisas, sí dijo que llevaría al Consejo de Ministros la petición general que le formularon los afectados en el sentido de que se decrete la emergencia cafetera o agrícola en el oriente de Caldas a raíz de los daños evidentes que han producido la roya y el invierno en el café y en otros cultivos.
Creemos que hay motivos suficientes para que desde el Ministerio se tomen medidas de ayuda en favor de los agricultores. Seguro que si sus técnicos realizan valoraciones de la zona los informes ratificarán los daños causados y se podrán adoptar acciones puntuales para contener el avance de la roya y de la broca en los sembrados cafeteros, al igual que atender las pérdidas en otras plantaciones, caso del plátano, el maíz, el fríjol y la caña de azúcar.
A nuestro juicio la Federación de Cafeteros, a través del Comité Departamental y de las cooperativas municipales, tienen que liderar un plan de cambio o de renovación de los cafetales actuales en el oriente de Caldas para devolverle la rentabilidad a esta actividad, ahora que los precios están en un momento excepcional.
Vale la pena recordar que nuestra misión como medio de comunicación está alineada con los intereses de la comunidad, y aún más con aquellos que viven en zonas apartadas y que tienen escasos medios para hacerse escuchar en las altas esferas del gobierno. Cumpliendo esa labor misional dimos la alerta sobre el nivel de infestación de roya en el oriente de Caldas, sin ningún propósito diferente a lograr que tanto el gobierno como las autoridades cafeteras atendieran ese llamado y le propusieran soluciones a los cultivadores de esta región. Nos alegra que así haya sucedido.
TOMADO DE LAPATRIA.COM
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